...la Biblia de Jerusalén
II Samuel 7, 16-22
16 Tu casa y tu reino permanecerán para siempre ante mí; tu trono
estará firme, eternamente.»
17 Natán habló a David según todas estas palabras y esta visión.
18 El rey David entró, y se sentó ante Yahveh y dijo: «¿Quien soy yo,
señor mío Yahveh, y qué mi casa, que me has traído hasta aquí?
19 Y aun esto es poco a tus ojos, señor mío, Yahveh que hablas
también a la casa de tu siervo para el futuro lejano... Señor Yahveh.
20 ¿Qué más podrá David añadir a estas palabras? Tú me tienes
conocido, Señor Yahveh.
21 Has realizado todas estas grandes cosas según tu palabra y tu
corazón, par dárselo a conocer a tu siervo.
22 Por eso eres grande, mi Señor Yahveh; nadie como tú, no hay Dios
fuera de ti, como oyeron nuestros oídos.